Con la entrada del nuevo milenio, ISOBUS se convirtió en el principal caballo de batalla en el proceso de innovación en el sector de la maquinaria agrícola. El objetivo era alcanzar una compatibilidad y estandarización completas entre tractores e implementos en lo que respecta a sistemas electrónicos. Y esto conlleva importantes ventajas. Una de ellas es que ya no es necesario instalar un monitor de control para cada máquina: El usuario puede utilizar un único terminal para todos los implementos. De este modo es posible establecer conexiones tipo "plug & play" entre tractores y máquinas.
Estandarización de los sistemas de control, mayor visbilidad y confort en las cabinas, conexiones simples... son algunas ventajas destacables por no mencionar el ahorro en la inversión al adquirir sucesivos implementos ISOBUS. Esta tecnología es especialmente recomendable para aquellos agicultores y empresas de servicios dedicadas a la siembra, fertilización y pulverización o para máquinas que proporcionan y a su vez precisan de un gran volumen de datos e información.